No tienen límites. Dignidad mucho menos. Pero quizás un poco de disimulo para no quedar tan lamebotas. Un cachito aunque más no sea. No es pedir demasiado ¿no?
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La frutilla del postre (además de las denuncias sin sustento probatorio y las insinuaciones conspirativas a la medida de EE.UU.) es ese párrafo que indica: "remarcan que las "reuniones secretas" entre el canciller
argentino, Héctor Timmerman, y el entonces ministro de Relaciones
Exteriores de Irán, el Sr. Ali Akbar Salehi (quien ahora dirige la
Organización de Energía Atómica de aquel país y es uno de los
negociadores nucleares principales en nombre de la República Islámica), se realizaron en paralelo a las negociaciones con el grupo liderado por EEUU".
¡Sin que lo supiera Ud. patroncito! Mamadera.
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