Dice Rodrigo Hinzpeter que en Chile
no hay razones para una huelga general, mientras los estudiantes siguen protestando y la oposición comienza a encolumnarse detrás de esos reclamos. Dice ésto con la ceguera típica del neoliberalismo que se ve a sí mismo como un dechado de virtudes que nunca se acaban de enumerar.
Aunque en algo tiene razón Don Rodrigo: los partidos de la Concertación tienen gran parte de la responsabilidad por el modelo educativo chileno actual.
Luego Rodriguito ejecuta en el aire una pirueta argumental que está de moda entre los neoliberales cuando hablan de educación: indica que las "clases acomodadas" no tienen porqué no pagar su educación. Pero Rodrigo, las clases acomodadas ya pagan su educación. Las que no pueden pagarla son las clases no acomodadas. Por eso las primeras tienen una ventaja que te la voglio dire con ese asunto. Ay Rodrigo.
Y pensar que el estadista que gobierna CABA añora el sistema educativo chileno. Y cada vez que puede remacha el clavo en esa dirección. Con los mismos argumentos. Lo parió.
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