Uno, porque es un salame, no termina de acostumbrarse a la obsoleta OEA, que desde que naciò, no hace más que hacer nada o, en el mejor de los casos, defiende los intereses de EE.UU. Y Paraguay no podía ser la excepción.
Y no lo fue. Allí estuvo Insulza (insulso), Secretario General de la OEA y dijo que no era conveniente hacer nada con Paraguay. A lo sumo van a mandar
"observadores" para monitorear el
"proceso" hasta las elecciones de abril de 2013. O sea, nada.
Fiel a su costumbre la OEA no mueve el culo a favor de los pueblos lastimados por los crápulas de siempre. No hace falta decirlo, esta inacción termina legitimando el golpe y al impresentable Franco. También sirve para institucionalizar la cuña que logró meter el gran vecino del norte en el seno del Mercosur.
Gracias Insulza, fiera, campeón, titán.