lunes, 23 de julio de 2012

EL MAL CAMINO

No sé qué parte de la historia reciente de Argentina se les pasó por alto, o simplemente es un típico chiste de gallegos, quién sabe. Pero habría que recordarles que fue el ajuste permanente, sostenido e irreductible lo que llevó a Argentina de cabeza a la crisis del 2001 (eso y algunas manos animosas y entusiastas que aprovecharon la sagacidad de Frenando de la Duda para persistir en sus errores dogmáticos).
O sea, si tuvieran como intención última no caer en el bolonqui del 2001 en Argentina lo primero que deberían hacer es pegarle una patada en el culo al FMI, al BM y a la UE en este caso y luego deportar o al menos reducir al ostracismo a las voces neoliberales que pululan con recetas que sirven para hundirte más en el fango.
Claro, hacerlos callar cuesta un montón de trabajo, máxime cuando tienen una prensa adicta que les da tribuna para que propalen verdades pseudo-económicas como si desparramaran la voluntad de dios (con tartamudeos intelectuales como los de Marcelo Bonelli).
Asi que, permítanme decirles amigos españoles, si siguen por donde vienen, van a estrellar el país contra la realidad que no es la que les están vendiendo en los organismos internacionales.
Conste que les avisamos.
...

3 comentarios:

Javier dijo...

El problema es que ellos no pueden devaluar y apuestan al ajuste deflacionario para bajar los costos mientras aprovechan para lograr desarmar la barrea que implico el estado de bienestar para los negocios financieros , digamos que la presion funciona bien , creo que solo se savaran los griegos cuando entren en septiembre por fin en default

Moscón dijo...

En cierta forma la gallega tiene razón,porque el metamensaje es:
En caso de violación hay que relajarse y gozar,resistirse es al pedo,y tengan por seguro que quieran o no los empomamos.
Ahí le veo un paralelo entre la política que lleva adelante la dirigencia española y el 2001 argentino.

ram dijo...

La mina ésa no parece nacida en Nepal pero gurka, lo que se dice gurka, ES. Y son frecuentes sus declaraciones descalificadoras hacia sus compatriotas, o sea, ¿qué se puede esperar que diga de Sudacalandia?.
El problema con los gallegos (y la diferencia con los argentinos) es que ellos, para "salir" de la crisis, eligieron a los que - y debían suponerlo - se la iban a empeorar.
Acá, sea por azar, inteligencia o milagro, se eligió cambiar el rumbo (no fue casualidad que la laucha riojana eludiera el ballotage, sabía que lo sepultaban los votos del hartazgo).
Los resultados no son tan paralelos, ellos van de cabeza al desastre y no se sabe cuándo ni cómo terminará, acá el camino recorrido es largo y los márgenes de retroceso no son tantos. Al gallegaje le falta bastante todavía