"El hijo del Nobel". Ésas son las credenciales con las que Perfil presenta a Álvaro Vargas Llosa. Mérito consanguíneo que para el diario es transitivo.
Por supuesto, y de acuerdo a su costumbre, Alvarito desgranó sus críticas habituales.
Nada nuevo bajo el sol.
Lo que sí llama la atención es que le partió el coco a Mauricio Macri. Mauri, entre nosotros, si los de tu bando te tiran con un trabuco naranjero, creo que tu candidatura está un poquito en peligro. Vos fijate.
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4 comentarios:
Si bien todos somos hijos de alguien, últimamente hay una epidemia de hijos pelotudos de padres que no lo son: el niño Mauricio, el Tatuado (no deja de ser un pobre infeliz con guita) , Rozitchner, éste nabo que nos ocupa...
Sujeto:
Pero no me va a negar los méritos que se van ganando solitos.Ya dan asco por la de ellos,sin ayuda del abolengo.
El tata por lo menos tiene talento.
No sabe nada de política, pero tiene talento.
¿Este? Pssss. (para usar un artemismo).
Aprovecho para felicitarlos por la aparición en Página/12: ¡bien ahí! Muy bueno lo de Dormidano.
Saludos.
Habría que instituir el premio "Puta" así lo titulan correctamente al jovencito éste, hijo de padre premiado.
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