lunes, 24 de mayo de 2010

¡ES QUE SOY UN PERVERSITO!


Ya le echaron la culpa a la homosexualidad.
Ya le echaron la culpa a los "revolucionarios sexuales"
Ya le echaron la culpa a los medios de comunicación.
Ya le echaron la culpa al diablo.
Ya le echaron la culpa a una conspiración contra Benedicto XVI.
Ahora le echan la culpa a los curas antes de ser curas.
El denominador común de todos estos argumentos es echarle la culpa a cualquiera menos a la Iglesia Católica (que no es perversa, ¿cómo va a pensar eso pedazo de hereje?).
Las viejas costumbres, bah. 

2 comentarios:

Unfor dijo...

Pará Bergoglio que así no te va a quedar ni un cura. Vas a tener que colgar este cartel:
"Negocio cerrado por falta de empleados"

Además, quién va a hacer la selección del personal?, los mismos que hacen el "control de calidad" de los productos?

José Pepe Parrot dijo...

Unfor:
No puede evitar pensar en la naturaleza del control de calidad.
Tiemblo por los pobres seminaristas...