jueves, 17 de marzo de 2011
OPERACIÓN BIBERÓN
martes, 1 de marzo de 2011
PRONTUARIO
viernes, 18 de febrero de 2011
SUJETO TÁCITO
miércoles, 16 de febrero de 2011
PEQUEÑO SCIOLI ILUSTRADO
jueves, 27 de enero de 2011
DESBORDE IMAGINATIVO
lunes, 24 de enero de 2011
COMO EL LORO
lunes, 10 de enero de 2011
CARTA DE RECOMENDACIÓN
miércoles, 17 de noviembre de 2010
INESCRUPULOSOS
martes, 10 de noviembre de 2009
EL HAMBRE ES UN CRIMEN: el auge del "palito de abollar ideologías"

Asqueado, como cada vez que me mandan estas porquerías, lo compartí con el socio autor de este Blog, Don Ringo.
Don Ringo, que si algo tiene es olfato periodístico, indagó acerca del origen de la información (la tabla comparativa que figura en el correo electrónico) y ¡bingo!, lo encontró.
Aunque debo decir que el descubrimiento no me dió tranquilidad alguna: la fuente de esta Tabla Comparativa era una noticia de la Subsecretaría de Medios del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires.
Esto es grave. Muy grave. Porque indica que la salida es reprimir. Castigar desde la más temprana edad. Castigar es la respuesta. Nada más.
Pero por si faltaran indicios hay otras noticias mucho más preocupantes aún:
Y hay más.
Los culpables. ¿No era que no había que publicar los rostros de menores? Pero claro, son menores delincuentes. Apenas les pixelaron un poco la zona de los ojos. Y encima son menores que vienen de la villa. Duro con ellos.
...
El hambre es un crimen que aniquila el prodigio de la vida. Debe ser detenido. Sí o sí. Los niños y las niñas son el más noble patrimonio de la sociedad argentina. Los niños son de todos, si comen o no comen, si van a la escuela o la abandonan, si lloran más de lo que ríen. Es deber moral y político de toda la sociedad modificar este estado de cosas. La provincia de Buenos Aires -como el resto del país- tiene hoy la responsabilidad política, moral y cultural de dar a cada niño una vida que merezca ser vivida.
El Gobernador Daniel Scioli con sus políticas públicas no está nutriendo, abrigando, abrazando a nuestros niños, que son los modos de ejercer el amor y la esperanza. Por el contrario su única y publicitada acción de gobierno es penalizar a los niños más niños a través de bajar la edad de imputabilidad. Como si nuestros hijos fuesen los responsables de la pobreza, del hambre inexplicable, del desempleo, de la degradación de la escuela pública, del desmantelamiento de nuestros hospitales. Pero domicilian a nuestros niños, con obstinación furiosa, en los fríos y duros artículos del Código Penal, colocando la alegría de nuestros pibes en vías de extinción.
Deviene entonces explicable, pero perverso, no pagar las becas, ni los subsidios, a más de doscientos mil niños y niñas que se encuentran en Organizaciones Sociales como Hogares, Casas del Niño, Jardines Maternales, Centros de Día, Centros Juveniles, Centros de Atención Integral y se los condena a habitar el país del desamparo.
Nuestras Organizaciones, sin otro propósito que la dignidad de la condición humana, intiman al señor Gobernador a abonar las sumas adeudadas y cumplir los compromisos adquiridos, dentro de 10 días.
De lo contrario miles y miles de pibes y educadores, rabiosos de ternura, marcharemos a encontrarnos con su mirada a la Casa de Gobierno “por la sangre unánime de los que luchan por la vida”.