Pero no de los que cortan calles, sino de los que empuñan la piqueta libre y arremeten contra el patrimonio arquitectónico de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Dentro de poco, y si les dejan las manos libres, veremos a San Telmo convertido en un ultramoderno barrio estilo Puerto Madero, mientras los muchachos del CPAU demuelen el Cabildo. Total, es un edificio viejo, a quién cuernos le importa.
Por suerte hay algunas personas que tienen las ideas en orden y pelean contra estos sátrapas con título y su aliado incondicional Mauricio Awada, que, junto con su amigo Crstian Ritondo, pretenden eliminar la ley 3056 de Protección de Patrimonio Arquitectónico de CABA.
Para más datos, entrá acá y enterate.
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