lunes, 12 de marzo de 2012

APOSTANDO POR LA EDUCACIÓN O APOSTANDO LA EDUCACIÓN

Si ésto no es ponerse la camiseta de la educación...privada, no sé lo que es. Sigue el huracán Macri y sus votadores haciendo pestaña lo que pueda hacerse pestaña. Y encima esos docentes quilomberos, reclamando por la calidad pedagógica. No quieren laburar, cuchame.

7 comentarios:

roberto dijo...

Acá en provincia pasa lo mismo, pero hay cierto silencio sospechoso.
sshhh!

José Pepe Parrot dijo...

Roberto:
Que no lo escuchen criticar porque sale a cazarlo la Fanatipatrulla Ideológica y ahí lo quiero ver.
Disimulemos, disimulemos...

H.M. dijo...

Considero que este motivo docente, no tiene nada que ver con ese paro inconsulto por el cual se reclamaban $200 más en el básico.
Aunque hay un círculo que sólo los docentes con vocación de "escuela pública" pueden romper... El círculo perverso es: En CABA se aumentaron más de tres puntos los subsidios a escuelas privadas, los docentes hacen paro -no importa el motivo, los padres sacan a sus hijos del sistema para ubicarlos en privada, se vacían las aulas, el gobierno cierra cursos...
Hay muchos docentes que hacen paro en la escuela pública y van a trabajar en la privada... Los hijos de docentes de escuelas públicas, concurren a escuelas privadas...
No sé cómo se soluciona un problema de "lo público" administrado y aplicado por personas con mentalidad privatista.
EL CAMBIO CULTURAL SE HARÁ EN LAS ESCUELAS PÚBLICAS O NO SERÁ.

José Pepe Parrot dijo...

Hilda:
Me debo y le debo al blog una serie de artículos sobre educación que alguna vez supe meditar.
En principio le cuento que, alejándome del sentido común, no creo que la educación esté en crisis. Paso a explicarme: si pienso en crisis supongo una situación que crea una complicación enorme para el futuro del país dado que la política educativa posee objetivos que se articulan con el desenvolvimiento educativo en todos los niveles, la articulación entre ellos y su posterior inserción en el campo científico. No en el laboral, dado que un mundo que se inclina a los servicios no requiere la presencia de un investigador sino de un acatador de órdenes.
Entonces, dado que esa complicación no parece para nada complicada, esto es, nadie pierde el sueño con el bajo nivel intelectual de los docentes (en general), la deficiente formación docente, la inversión que creció pero no como para generar un cambio, la impotencia de la escuela frente a escenarios complejos, la caída en la consideración de la profesión docente (usada como escape y no como una manera de desplegar formas de socializar el conocimiento).
Si alguien perdiera el sueño de verdad, habría cambios y de fondo, comenzando con la formación, pasando por las aulas, siguiendo por la formación permanente, y así.
De lo anterior mi conclusión es que tenemos la educación que corresponde a una sociedad que se vuelca a los servicios como salida laboral y en donde la creación de conocimiento y su posterior vuelco a la sociedad en forma de tecnología y luego valor agregado, no es importante.

roberto dijo...

Dormi, ya pasarón por mi blog, viera como me retaron.

José Pepe Parrot dijo...

Roberto:
Yo le dije, andan sueltos y en cuantito uno se aparta de la supuesta ortodoxia lo atacan a uno con un montón de dogmas que no tienen sustento.
Acá ya me agarraron con lo de la minería y al ratito nomás, con la política de transporte.
Pasa Roberto, que no somos puros de corazón. Así nos va.

H.M. dijo...

Comparto plenamente lo que decís.
Una manifestación cabal de esto es la "obligatoriedad de la enseñanza media".
Si no hay un abanico de posibilidades para que el estudiante pueda desarrollarse en su propia capacidad, es absurda la obligatoriedad. Sólo se logra bajar el nivel porque... Seamos sinceros, ¿voy a bochar a un alumno que no puede hacer una factorización compleja de polinomios si va a trabajar como repositor de supermercado?
O a un alumno que pretende este puesto –leído en Clarín- “Lavadero de autos, Estudios secundarios completos”.
En cuanto a la actualización docente… Lamentablemente, la primer pregunta que se escucha es: ¿Qué puntaje da?... y, algo más deplorable todavía es la grilla de puntajes. Un curso en el cual debés demostrar aptitudes puede dar 0,02 puntos y, otro donde las evaluaciones son presentaciones que muchas veces se hacen sin criterio en la sala de profesores, donde no falta el (habitualmente es él) que, como todo aporte al estudio, lleva a sus compañeras a la presentación –a las que le hicieron la prueba- otorga 1,5 puntos
Por eso ¿Cómo se hace? ¿Se puede colaborar en ese hacer? Eso debe salir de una política de estado… Es un tema que me preocupa…