Esta costumbre empresaria de poner la culpa en donde no corresponde comienza a exasperarme. Tanto como la condescendencia de los periodistruchos que le dan alas a semejante pretensión de disculpa. ¿Ta claro? Ahora resulta que "los jóvenes" no duran en un trabajo porque "hay una crisis de autoridad". Claro, cómo no lo había pensado. Y a estos imaginativos cronistas no se les ocurre otra cosa que usar como ¡ejemplo! el laburo en un call center.
Y por supuesto, la culpa es de la familia y de la escuela porque no les enseñan a los "jóvenes" a ser buenos esclavos. Es muy interesante eso si, la confesión de parte que campea en la nota. Los pibes, que no son tarados (y eso es un logro inmenso) no se comen el verso que le hicieron a los padres y cuando la cosa no pinta si te he visto no me acuerdo. Buscan a ver si enganchan un laburo mejor, en donde la cosa no sea tan fulera.
Y claro, conseguir siervos en esas condiciones,¡cuchame!
¡Crisis de autoridad te voy a dar!¡Me saco la chancleta mirá!
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Me olvidaba: todo esto pasa porque reina la anarquía, en cambio con los militares esto no ocurría, ahí si que no había crisis de autoridad y todos marchaban derechitos, pelo corto, saco y corbata. ¡Tomá pa vos!
5 comentarios:
Yo no me explico como los "jóvenes de hoy" no pueden ponerse la camiseta de Telecom, Sprayette, McDonald's o una empresa como el call center de DirecTV, que quiere al país.
Tristeza.
Me mata eso de que la cultura del trabajo pasa por trabajar hoy para conseguir una gratificación un lejano día de mañana. Seguro que encima, esta manga de pendejos vagos e interesados, pretenden cobrar el sueldo a fin del primer mes.
Eso me hace recordar a un viejo propietario rural que conocí hace un par de años: se lamentaba porque los peones no querían arrancar los yuyos a manos, y decía que eso es porque "no respetan la autoridad".
La verdad es que los empresarios siguen añorando la esclavitud, y lo que es peor algunos la practican...
Esto me recuerda a algunos que querían que yo me resignara humildemente en esta vida, para ser recompensado con la eternidad en otra.
¿Puede ser que sea hereje por partida doble?
Uy, che, voy a tener en cuenta lo que dicen los garcas dueños de call centers. Voy a tratar de que en mis materias universitarias (yo doy filosofía) los pibes no piensen en lo más mínimo y acepten un par de reglas que vienen de arriba sin discusión y sin chistar. ¿De dónde salió que en filosofía hay que discutir presupuestos y prejuicios? Qué locura. El día de mañana, cuando entren a trabajar en el call center ese de la vuelta de mi casa, en negro, con un jefe al que conocen sólo por teléfono y cuya única función consiste en cagarlos a pedos por las dudas, ahí los quiero ver eso de andar cuestionando los principios ontológicos, fundamentando axiomas y buscándole la vuelta a las falacias de discurso.
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