viernes, 19 de noviembre de 2010

QUE LA INOCENCIA TE VALGA

Ya se habrán enterado de éste asunto. En Formosa la policía reprimió a los alumnos del Colegio Nacional Juan J.Silva. Tal como se puede comprobar observando las imágenes que andan circulando por todas partes.
El comisario general Juan Bernabé Escobar, Jefe de Policía de Formosa, intentó hoy explicar el asunto. Pero como reza el dicho popular, no aclare que oscurece Juancito.
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Una sola perlita que está ahí en la entrevista:
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"-¿Se detuvo en algún momento al diputado?
-En absoluto, no se detuvo al diputado en ningún momento. Creo que tenemos que ser justos y tenemos que ser honestos. Creo que la policía ahí pecó de inocente por haberle dejado al diputado Hernández que suba al patrullero, la policía le dejó porque él solidariamente se ofreció a acompañar.
Además sabemos que para nosotros es una garantía que él le acompañe a la profesora. Eso fue lo que la Policía hizo. Queda una enseñanza, que nos deja el diputado, que la próxima vez que alguien nos diga voy a acompañar, seguramente vamos a decirle, busque un vehículo particular y váyase por su cuenta, para que no ocurra esto."
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Me imagino.
La nota está plagada de este tipo de argumentos que nos recuerdan ese viejo adagio que decía "no, no le pegué, él me agarró la mano a carazos" que está muy de moda en éstos días. Y también como se lleva en éstos días, la culpa es de los infiltrados. Que son así, infiltrados. Recorren el país de un lado a otro. En cualquier momento toman el poder, yo te lo advierto:
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“El comisario obvió decir que muchos de los que tomaron la escuela responden al Partido Obrero y entonces uno se pregunta que hacían militantes del Partido Obrero tomando esta institución”,
(El asesor de la Junta Electoral del colegio J. J. Silva, profesor Hugo Fernández)
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Una besheza.
Mäs datos sobre el asunto, acá, acá y acá.

1 comentarios:

Jorge Mux dijo...

Ah, pero está todo dicho. Estaban los ultraterroristas y maquiavélicos militantes del Partido Obrero. Contra tamaña fuerza de inteligencia cínica y destructiva, la policía es un bebé de pecho que peca de inocente.