miércoles, 23 de diciembre de 2009

BIT & BYTES: ¿Vamos a tomar un mate mientras "carga" el jueguito?

La primera computadora que toqué en mi vida se llamaba ZX Spectrum. Un aparatejo que se enchufaba al televisor, que tenía un teclado diminuto y cuyos programas se escribían en BASIC.
¿BASIC? Si, BASIC.
Por ejemplo:
...
10 CLS
20 FOR A:1 to 30
30 FOR B: 1 to 30
40 LOCATE A,B:print":":print")"
50 NEXT B:NEXT A
...
Si no me equivoco y mis escasas habilidades como programador no han desaparecido por completo, este programa desplegaría un pequeño cuadrado de sonrisas ":)" en algún lugar de la pantalla. Pero todo puede fallar.
El segundo "ordenador" al que tuve acceso era una Commodore 64 C. La legendaria Commodore. Al lado de la Spectrum era un avión. Una velocidad "superior". Traía entre otras cosas, una especie de cassettera en donde uno ponía una cinta que tenía grabado un juego o programa. Preparaba todo, apretaba "play" y había que esperar más o menos dos termos de mate para poder usar el software. Siempre y cuando la cinta no estuviera dañada o la computadora no muriera en el intento.
Y llegó la tercera, que no fue la vencida: Talent MSX. Tremenda máquina. Calculá que ya venía con una disquettera, con discos flexibles de 5 1/4. Una preciosura. En la Talent me puse ducho en los secretos del MS DOS.
¿Qué carajo es el MS DOS? Microsoft Disk Operation System. Un sistema operativo. El sistema operativo con el que Bill Puertita se llenó de biyuya.
Un sistema operativo que sigue estando detrás del Windows, y que uno puede pispear cuando arranca la máquina o cuando se mete en esa opción de herramientas que dice "símbolo de sistema".
En estas primeras máquinas aprendí un montón de trucos, sobre todo esa alquimia llamada "programación". Los primeros secretos del Assembler. El oscuro "lenguaje máquina" que se ocupa (todavía) de manejar las profundidades de una PC con sus asignaciones de memoria y sus extrañas instrucciones para desplazar bloques de instrucciones de un lado a otro.
También conocí a aquellos artesanos que comenzaban a transformar ecuaciones, algoritmos, en cosas cuasi vivas: los "virus". El tremendo "Viernes 13". El "Michelangelo". Los Worms. Y por supuesto, los legendarios hackers que desmantelaban programas para comprender su funcionamiento y se inventaban máquinas para hablar gratis por teléfono.
Internet era apenas una quimera y la conectividad consistía en enchufar dos máquinas mediante el puerto serial de la impresora.
Que manera de hacer arqueología che.
...
60 END
...

4 comentarios:

Anónimo dijo...

ja!
"nena, el futuro es la computación ¿vistes?, te anoté en el IAC del barrio para que aprendas". algo así debe de haber dicho mi vieja, y así aprendí a hacer bases de datos "para videoclubes" en basic. ¡qué pesadilla fue!

P.

Oscar dijo...

Cuando yo trato de que mi hijo entienda que no tenían rígido y que la RAM eran 64K y no 64 megas, me mira como entendiendo que estoy viejo y me confundo. Cuando le mostré el datasette lo miraba como si viera un alien...
Con mi concuñado habíamos creado, para la Commodore 128, un sistema de gestión para estudios jurídicos que era una maravilla. Y cuando lo quisimos hacer guita empezaron a salir las PCs accesibles a los seres humanos normales y nos mataron.
Minuto de silencio para la AMIGA. Lo más grande que ha pisado esta Tierra.
Abrazo navideño.

Mariam dijo...

¿Grupo de expertos en nostalgia?

Rodrigo. dijo...

Sí, las Talent M S X eran la competencia de las Commodore 64 y también de las 128, creo que esas salieron poco tiempo o algo parecicido.
También en la secundaria que iba había unas M S X donde nos enseñaban, a través de los " Cassettes " y más o menos 15, 20 minutos de cargarlos en la máquina, Biología de 1er. Año y en Segundo, Física; nunca llegaron los Cartuchos, todo era con los Cassettes.
En esa época me compré una Talent M S X, la cual aún funciona, ahora guardadita en el placard.