Esa cosa que de entrecasa ropa vieja y chancletas, pero si vamos al médico,la pilcha más nueva. Que costumbre miserable en toda su esencia. Además, el comentario, "ni nos imaginábamos que ibamos a vivir algo así", es bastante inocente. Digo, uno no se imagina cosas así, es real. El tema es como lo contextualiza quien lo escribe.
Es que el periodista ese es así, Dormidano. Como la tía Joaquina. Le pide disculpas a los turistas, "gente de afuera", los trapos sucios se lavan en casa, no se exponen en el Colón... que mentalidad miserable.
Almita: En mi pueblo había una comisión que organizaba un festival de folklore. Y resulta que nunca querían contratar a los grupos del pueblo y alrededores. El argumento era ¿para qué mostrar miserias? Así como se lo cuento.
Dormidano: Piso la media gamba y cuando tendría 11 o 12 mis hermanos me hicieron escuchar El Lado Oscuro de la Luna,mientras leía a Robin Wood con dibujos de Lucho Olivera en la tremebunda capítulo a capítulo Nippur. La música nace con uno y se pega al imán mas inmantado.
Moscón: Yo era un pequeñuelo y mis padres me regalaron un Grabador. Chiquito, con un sólo parlante. Yo tenía 10 años. El señor de la casa de audio me pasó un casette con música para probar el aparato. Yo, sin saber qué cornos era escuché y me gustó. Ya era retorcido de chico yo. Cuando volví al service del grabador (eso se hacía en ésa época) le pregunte al tipo qué era ésa música. Me respondió: es jazz, y lo que escuchaste es un rejunte, Miles Davis, Charlie Parker, Thelonius Monk, etc. Huelga decir que soy fanático del jazz y que de pequeño nomás me entrené en eso de apreciar la buena musica.
Hace algunos años, los medios se hacían eco de los indignadísimos gritos de unas señoras italianas que decían "Merda, Aryentina" por el paro de pilotos de avión. No importa si los pilotos trabajaban en condiciones miserables, ni si en otros servicios de transporte nuestros compatriotas viajan como el orto o no viajan por desinversión empresarial; lo único importante es que no debemos quedar mal ante los turistas.
Esa cosa que de entrecasa ropa vieja y chancletas, pero si vamos al médico,la pilcha más nueva. Que costumbre miserable en toda su esencia.
ResponderEliminarAdemás, el comentario, "ni nos imaginábamos que ibamos a vivir algo así", es bastante inocente. Digo, uno no se imagina cosas así, es real. El tema es como lo contextualiza quien lo escribe.
Almita:
ResponderEliminarMe imagino al periodista tratándose de disculpar en nombre de éste país de mierda lleno de laburantes que protestan.
Es que el periodista ese es así, Dormidano. Como la tía Joaquina. Le pide disculpas a los turistas, "gente de afuera", los trapos sucios se lavan en casa, no se exponen en el Colón... que mentalidad miserable.
ResponderEliminarAlmita:
ResponderEliminarEn mi pueblo había una comisión que organizaba un festival de folklore. Y resulta que nunca querían contratar a los grupos del pueblo y alrededores. El argumento era ¿para qué mostrar miserias? Así como se lo cuento.
Mensaje para Stephan Lens,desde Rosario:
ResponderEliminarChupito el Pame.
Moscón:
ResponderEliminar¡Que van a pensar de nosotros en González Catán!
Dormidano:
ResponderEliminarMe importa un saxo.
Moscón:
ResponderEliminarDígaselo a Kenny G que en éstos días aterriza en CABA.
La música...bueno, la música está en otra parte.
Dormidano:
ResponderEliminarPiso la media gamba y cuando tendría 11 o 12 mis hermanos me hicieron escuchar El Lado Oscuro de la Luna,mientras leía a Robin Wood con dibujos de Lucho Olivera en la tremebunda capítulo a capítulo Nippur.
La música nace con uno y se pega al imán mas inmantado.
Moscón:
ResponderEliminarYo era un pequeñuelo y mis padres me regalaron un Grabador. Chiquito, con un sólo parlante. Yo tenía 10 años. El señor de la casa de audio me pasó un casette con música para probar el aparato.
Yo, sin saber qué cornos era escuché y me gustó. Ya era retorcido de chico yo.
Cuando volví al service del grabador (eso se hacía en ésa época) le pregunte al tipo qué era ésa música. Me respondió: es jazz, y lo que escuchaste es un rejunte, Miles Davis, Charlie Parker, Thelonius Monk, etc. Huelga decir que soy fanático del jazz y que de pequeño nomás me entrené en eso de apreciar la buena musica.
Hace algunos años, los medios se hacían eco de los indignadísimos gritos de unas señoras italianas que decían "Merda, Aryentina" por el paro de pilotos de avión. No importa si los pilotos trabajaban en condiciones miserables, ni si en otros servicios de transporte nuestros compatriotas viajan como el orto o no viajan por desinversión empresarial; lo único importante es que no debemos quedar mal ante los turistas.
ResponderEliminarQue cagada lo geográfico,tenemos que tomar un par de grapas.
ResponderEliminar