Hace pocos días, Ricardo Alfonsín y Margarita Stolbizer se juntaron con la Mesa de Enlace. Leamos lo que el diario La Nación reseñó del encuentro: “Los dos candidatos remarcaron que proponen, en el corto plazo, bajar las retenciones y eliminar las restricciones a las exportaciones de carne, trigo y lácteos. "Para mejorar los stocks, activar la producción, atraer inversiones y generar trabajo”.
Mirá vos. Justo lo que el “campo” pide. Parece que les sacaron las palabras de la boca a los “hombres de campo”
Ayer, ya no sos mi Margarita estuvo en el coloquio de no se nos cae una sola IDEA, en donde los políticos de todos los signos del zodíaco van a rendir examen cuál alumnos en situación del mismo y en mismo acto pleitesía a los próceres empresarios. Y en uno de esos rejuntes en donde los “hombres de negocios” pueden jugar a la escondida ocurrió lo siguiente, según Ámbito Financiero:
“Aunque no fue la única política ni candidata entre los empresarios, Margarita Stolbizer fue la que se llevó una ovación entre los hombres de negocios durante una sesión interactiva donde el conjunto -bajo anonimato- daba a conocer su opinión en temas como seguridad jurídica, corrupción, empleos, salarios y desigualdad.
"Me aplaudieron cuando planteé que la lucha contra la pobreza extrema implica también luchar contra la riqueza extrema e hice la aclaración sobre la riqueza mal habida, en relación a los patrimonios que los funcionarios públicos no pueden explicar", aclaró en diálogo con ámbito.com. Al decir similares palabras en la sesión en la que participó como oyente desató un aplauso cerrado entre los empresarios que cada vez dan más signos de descontento con la administración nacional.”
Volvé a mirar vos.
¿Así que los únicos que tienen riqueza mal habida son los funcionarios públicos que no pueden explicar su patrimonio?
Recurriré a las insignes palabras del Aníbal Fernández que, en alusión a una conductora que no se mira el ombligo declaró: “¿Y Boston?”
Resulta ahora, menos mal que me enteré, que los “empresarios argentinos” son unos seres impolutos, decentes y emprendedores, que no hace más que colaborar para la construcción de un país más mejor para todos. ¿Cómo no me di cuenta?
La riqueza que los tipos amarrocan es más limpia que una sábana lavada con Ala.
Por eso aplauden cuando sindican a los funcionarios públicos como sujetos de corrupción. Con justa razón por otra parte, dado que su propia actuación en el campo de los “negocios” los deja a salvo de cualquier crítica.
Y Margarita, como en el caso de la Mesa de Enlace, les da el gusto. Por eso cuando habla de riqueza mal habida señala al gobierno y no a los tipos que la aplauden porque hay que quedar bien con el patrón, no le des de qué quejarse.
“A su turno, lo primero que propuso la diputada fue combatir los bolsones de pobreza y también los bolsones de riqueza. Ante la mirada de desaprobación de más de un empresario, Stolbizer rectificó y habló de riqueza mal habida. "Eso se llama cintura política", bromeó el moderador Alfredo Leuco.”
Los dos, uno más cretino que el otro: Stolbizer porque arrugó como frenada de gusano (costumbre radical si las hay) y Leuco, porque sabe que la riqueza mal habida estaba sentada viéndolo y riéndose a carcajadas, pero él no dirá una sola palabra, por más o menos lo mismo que Margarita.
Lejos del verso pseudo-progresista que anda desparramando por éstos días, frente a los que tienen la tarasca, Stolbizer tuvo que abjurar del discurso con el que recorre los medios moralizando al país hijo de puta que insiste en votar al FPV. Se olvidó de una sola vez del sonsonete de la redistribución y la brecha entre ricos y pobres con el que supo pontificar desde las tribunas televisivas. Sostener esa postura (que, evidentemente no es una convicción sino engañapichanga) hubiera implicado mantener los dichos en primera instancia: luchar contra la pobreza es luchar contra los bolsones de riqueza. Pero se desdijo, libró a los “empresarios” de toda culpa y los absolvió de su responsabilidad, como si la riqueza mal habida de los funcionarios fuera todo el problema, como si la voracidad empresaria fuera una entelequia, como si la brecha entre ricos y pobres no tuviera un soto que ver con la acumulación de riqueza en forma desmedida, especulativa y usuraria.
Volvió a bajarse los pantalones (o la falda, que se yo) como ante la Mesa de Enlace.
Lindos estadistas estos, los tipos indicados para cumplir con lo que proponen: "replantear una política fiscal que no resiste más parches", acordando "con los partidos políticos, representantes sectoriales y las universidades un esquema progresivo".
Si. Seguro. No me cabe la menor duda que lo van a hacer. Previo pedido de permiso al señor patroncito. Faltaba más.
Y sigo escuchando música cuando leo "política", la margot impulsa la beatificación del garquerío vernáculo,¿toda la sarasa alrededor no suena a esto?:
ResponderEliminar"Pero, eso sí, los sicarios no pierden ocasión
de declarar públicamente su empeño
en propiciar un diálogo de franca distensión
que les permita hallar un marco previo
que garantice unas premisas mínimas
que faciliten crear los resortes
que impulsen un punto de partida sólido y capaz
de este a oeste y de sur a norte,
donde establecer las bases de un tratado de amistad
que contribuya a poner los cimientos
de una plataforma donde edificar
un hermoso futuro de amor y paz."
Moscón:
ResponderEliminarSi suena a eso.
Y si, es sarasa.
¿Sabe qué pasa, Dormi?, se está volviendo viejito y cascarrabias más las bisagras chirriantes y los ojos mustios, se le escapan los "conceptos" y no lee ni oye bien. Donde dice "funcionarios públicos", es "funcionarios pútridos", pútridos, Dormi, en fase terminal. ¿Se da cuenta ahora?. De nada...
ResponderEliminarRam:
ResponderEliminarSi, me estoy poniendo viejo y quisquilloso.