En
los foros en donde los empresarios se juntan a cambiar figuritas, los
citados hablan como si la riqueza surgiera a la luz del día por sus
méritos individuales, por su esfuerzo y dedicación y una vida de
contracción al estudio.
Uno
puede llegar a creer (y confundirse) que son esos hombres atildados,
que elevan brindis y hablan con palabras pseudocientíficas, los
responsables de su propia prosperidad.
Me
detendría varios párrafos a desmenuzar semejante falacia, pero no
tengo tiempo porque tengo que ir a jugar a la quiniela, así que resumo
mis apreciaciones con un ejemplo directo pero efectivo.
Supongamos
que en este rincón hay un “empresario” de la construcción
diciendo que su iniciativa personal, su olfato para los negocios y
otros epítetos por el estilo son los causantes de la fortuna que
amasó e incrementa un día sí y otro también. Y que debido a eso
la consabida riqueza se derrama y así.
Hagamos
como que le creemos.
Y
pidámosle al empresario que nos acompañe a un baldío en donde se
va a construir, por ejemplo, un edificio de ocho pisos.
Dejémoslo
parado en el frente mismo del lugar y traigamos al sitio todos los
materiales que hacen falta para elevar la construcción. Sin
descargarlos, claro está.
Y
ahora esperemos el milagro del que habla el empresario. Que, mediante
la imposición de sus manos mágicas y por su intercesión, el
edificio se eleve mágicamente desde las entrañas de la tierra y
proyecte su figura imponente sobre el horizonte.
¿Qué,
no pasa nada? ¿Los materiales están ahí riéndose de Janeiro y de
nuestra amplia ingenuidad con dependencias?
Si
claro, me dirán todos. Para que el edificio exista debe mediar el
trabajo de los albañiles, que convertirán una pila de materiales en
departamentos.
Listo.
Calculo
que ya se entendió.
...
La foto la robé de acá
No viejo,usté le quiere sacar la epopeya a la aventura empresaria que si no fuera por ellos no labura nadie.
ResponderEliminar¿Alguna vez, el dueño de la pelota se quedó sin jugar?Y guarda no vaya a hacerle un ful medio bravo porque se calienta, llora, se lleva el balón y aquí no juega mas nadie.
¿Y que me dice de los deportistas que ganan sumas astronómicas?¿Esfuerzo propio?Los quisiera ver a Pelé,Messi o maradona hace cien años atrás a ver que hacían con sus "habilidades".
Son capaces de decir que sin su dinero el trabajo no vale nada, aunque existan cooperativas donde los trabajadores son también los dueños, y empresas estatales. Ellos siguen soñando con que son el ombligo del mundo.
ResponderEliminarMoscón:
ResponderEliminarQué buen tema ha lanzado al tapete.
Prometo analizarlo.
Iris:
ResponderEliminarSin duda.
Calcule, son capaces de decir que ellos "dan trabajo" y no el trabajo les da lo que tienen.
Como bien dicen en el movimiento de empresas recuperadas, "fábricas sin obreros no existen, pero sin empresarios, SI!".
ResponderEliminarEs interesante la transformación que un clasemediabaja sufre cuando se cuelga el ŕotulo de "empresario"... Automáticamente se vuelve un paraonico que piensa que TODO el mundo le quiere defecar encima (please pardon my french)...