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"Así, la magia acabó creyendo que el conocimiento era su obra y no su deuda. Se alejó de las criaturas para sentarse en un cielo remoto, desde el cual se proclamó primera en las virtudes. Elegida para regir sobre los simples." (Liliana Bodoc, "Los días del fuego", de "La Saga de los Confines", libro III, pag.155)
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"La Iglesia" como acostumbra llamarse, debería leer estas palabras de Liliana Bodoc e intentar enmendarse. Aunque calculo que ya ha perdido el rumbo para siempre.
Que la pasen lo mejor que puedan. A lo sumo o nada menos.
Hay una palabra en España para designar a esta gente: "casposa".
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