Claro, tal cual. Cuando vos necesitás decir que no perdiste el liderazgo, es porque quedó allá atrás, en la espuma de los días. Esas obviedades que uno comete, por ejemplo decir: "Cuando era más joven" (frase que me sale y se me cag... de la risa) "¡A mí me tenés que respetar!" (listo, estás al horno) "¡Yo soy tu madre/padre!" (nah, si ya tenés que arrancar con eso, hace las valijas y andate. Bueh, que lo mismo le pasa a Obama.
No tengo dudas de ello, Dormidano, adhiero a lo que decís. Hace mucho tiempo (pero voy a buscarlo y ver de ponerlo en mi blog) decía que estabamos en un medioevo aceleradísimo. Creo que ahora, como entonces, estamos al borde de un renacimiento, pero también será aceleradísimo, y no sé ni puedo imaginar las consecuencias.
Claro, tal cual. Cuando vos necesitás decir que no perdiste el liderazgo, es porque quedó allá atrás, en la espuma de los días.
ResponderEliminarEsas obviedades que uno comete, por ejemplo decir:
"Cuando era más joven" (frase que me sale y se me cag... de la risa)
"¡A mí me tenés que respetar!" (listo, estás al horno)
"¡Yo soy tu madre/padre!" (nah, si ya tenés que arrancar con eso, hace las valijas y andate.
Bueh, que lo mismo le pasa a Obama.
Almita:
ResponderEliminarSon los síntomas que se multiplican y son cada vez más patentes. Creo que asistimos a un momento histórico.
No tengo dudas de ello, Dormidano, adhiero a lo que decís.
ResponderEliminarHace mucho tiempo (pero voy a buscarlo y ver de ponerlo en mi blog) decía que estabamos en un medioevo aceleradísimo.
Creo que ahora, como entonces, estamos al borde de un renacimiento, pero también será aceleradísimo, y no sé ni puedo imaginar las consecuencias.
Almita:
ResponderEliminarSerá jodido, eso si. Porque éstos muñecos no se van a rendir sin hacer quilombo.