En éste pequeño y emotivo acto, Alan García solicita a grito pelado relaciones carnales con EE.UU. Pide con tanto énfasis porque el tujes que va a poner en entredicho no es el suyo propio. Si yo fuera peruano, conseguiría un cinturón de castidad de alta resistencia.
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ResponderEliminarQuéeeeeeeeeeeeeee??????!!!!!
ResponderEliminarClaro, por eso Marcos Aguinis y toda la comparsa nos invitan a imitar a Perú.
Qué lindo, eh!
Jaime Bayly debe estar chocho.
Discriminación en estado puro,pobre alan,malas lenguas que abreban en fuentes jocosas dicen que dijo"¿Que,el culo colombiano e´mejor quel peruano?"
ResponderEliminarUnfor:
ResponderEliminarEstán preparando el terreno.
Imagínese la cantidad de banderitas de barras y estrellas que van a usar.
Alan y Jaime, abrazados. Marcos ya está subiéndose el avión.
Se pone chivo el sitio para meter un comentario
ResponderEliminarMoscón:
ResponderEliminarEs más, está llamando a varios estilistas Alan, por ahí cambiando de look lo seduce a Obama.
Moscón:
ResponderEliminarAnda corcoveando lindo el blospot.
Dice: yo no hago cuestión de soberanías y patriotismo"
ResponderEliminarEs el mismo hijo de puta (con el perdón de las trabajadoras sexuales) que dijo: y si los chilenos se molestan?" cuando alguien cuestionó la venta de gas a Chile
Dice también:...tropas de entrenamiento"
Le buscan todo el maquillaje posible a la cosa: que son sólo tropas de entrenamiento, que es sólo temporal, que vienen sólo a ayudar ("acción cívica") porque saben de antemano el gran rechazo y repudio dentro y fuera del país estos actos entreguistas, de ofrecerse como prostitutas baratas
Espartaco:
ResponderEliminarAcá no nos pudimos sentar por años luego de que Carlos Saúl I nos involucrara en relaciones carnales con el Tío Sam.
Pero, hay que decirlo, muchos argentinos aplaudían este estado de cosas.
Hay de todo en todas partes.
Bueno sí se trata de eso, acá también hay quienes aplaudirían -y ahora exigen- ese estado de cosas.
ResponderEliminarAsí como en el mismo EEUU hubo quienes aplaudieron el estado de cosas de la invasión a Irak (porque les parecía muy justo neutralizar las armas de destrucción masiva en manos de un 'dictador'; armas que siempre se supo que no existían -escúchenlo a Aznar)
Y en Alemania hubo quienes aplaudían a rabiar las invasiones nazis.
En fin, lo real y cierto es que la verdad de la milanesa es que la soberanía no tiene precio. La soberanía es la primogenitura que no se puede venderla por platos de lentejas. Así haya quienes lo aplaudan.
En los '80 habia una cancioncita que decia: Patria Querida,dame un presidente como Alan Garcia. En contraposicion,obvio,a Alfonsin.
ResponderEliminarNo me acuerdo quien la cantaba,pero me imagino que ahora debe tener un dolor de huevos que ni le cuento.
Y bue,algunos envejecen dignamente y otros se vuelven unos viejos chotos.
Saludos
Espartaco:
ResponderEliminarCierto. La soberanía no se negocia. Cosa que Carlos Saúl y Alan deberían entender.
Quilmeño:
ResponderEliminarVoy a buscar esa canción.
La encuentro y acá estará, en letra o música o ambas.
Prometido.