Si llaman a tu puerta un domingo, fíjate bien hermano: puede que no sean Testigo de Jehová, Mormones u otras confesiones religiosas que buscan tu adhesión. No.
Quizás golpea tu puerta un señor de la ¡Iglesia Católica! que viene a interrumpir tu cómoda siesta secular, reclamándote más atención a esa parte de tu vida llamada "espiritualidad" y que los señores del Vaticano igualan a lamerle las botas al Papa.
Si es así, y en los tiempos que corren, fíjate hermano antes de abrir: quizás venga acompañado por una brigada anti-herejes, munida con todo tipo de adminículos ad hoc.
¡Atención! Recuerda tener a mano el cinturón de castidad y jamás darle la espalda al representante del Señor Ratzinger.
Así sea.
Ratzinger hincha para Alemania el sábado, contra nosotros?
ResponderEliminarPorque el Vaticano no clasificó, y eso que tiene casaca amarilla como el Pro.
¡Uau! ¡Reevangelizar occidente!
ResponderEliminar¿O sea que van a necesitar más platita para eso? ¿O con lo que robaron en todos estos siglos será suficiente?
Unfor:
ResponderEliminarDepende de cuánto haya, Ud. sabe cómo son esas cosas...
Jorge:
ResponderEliminarEso es, quieren hacer caja. Porque la salud espiritual de sus corderos les interesa un kopek, a lo sumo...
Si van a repartir comida y salud, bienvenidos, si van a venir a dar charlas, que se queden allá.
ResponderEliminarAlmita:
ResponderEliminar¡Pero me extraña!
Rapartir comida y salud es invertir, y ellos quieren extraer.
Más que charlas, lavado de cerebro.
Hemos puesto los miedos en lugares equivocados. Un gran abrazo.
ResponderEliminarIgnacio:
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo.