Venimos siguiendo desde hace un tiempo la actuación de la Iglesia Católica en relación con los abusos que se perpetraron al interior de instituciones pertenecientes a esa religión. Hemos reseñado cómo esa iglesia se niega obstinadamente a romper el silencio sobre el asunto. Ahora el papa Benedicto XIV escribió una "misiva pastoral" en la que pide perdón y dice tener "vergüenza". Claro, todo ésto en los veloces tiempos de la jerarquía católica que por fin ha sido puesta frente a sus delitos y ha tenido que pronunciarse (algo que evita con la mayor tenacidad, salvo si se trata del matrimonio homosexual u otros temas en donde hace sentir su censura con la mayor celeridad).
El primado de Irlanda, a tono con este mea culpa (una oración bastante perversa ahora que lo pienso), también pide perdón por haber encubierto casos de abuso.
Esta parece ser la estrategia, pedir perdón.
Dos portales religiosos, uno español, Religión en Libertad y otro argentino, Valores Religiosos, intentan defender a su vez a la Iglesia Católica, cosa que no es reprobable en absoluto. Es más, para eso están. Pero la defensa que esgrimen podría calificarse sin ningún problema de hijaputéz. Una cretinada enorme.
El portal Valores Religiosos publica una nota tomada de Religión en Libertad en donde señala el peso estadístico de los abusos en instituciones católicas en Alemania. Como la cifra es menor al total, se argumenta que la Iglesia Católica no es tan responsable.
Pero la cosa no queda ahí: se indica que los casos ocurridos dentro de la Iglesia Católica reciben mayor prensa dado que los periodistas están a favor de la "revolución sexual".
Y hay más: el artículo discute el significado de la palabra "abuso". Según ellos el abuso no es necesariamente vejación sexual sino también golpes e insultos. Con esto pretenden que las víctimas sean menos víctimas y los victimarios menos victimarios. Pero, oh sorpresa, también se desprende de este razonamiento que en realidad pegarle sopapos e insultar a los pibes está bien.
A cada minuto dan más asco.
No sólo por lo que han hecho (y hacen y todavía no sabemos) sino por la forma en que intentan diluir su responsabilidad.
Ok, ellos dan asco. ¿Nosotros qué damos, con nuestra inacción? con nuestro permiso para no poner ni una sola voz crítica a estos atropellos. Ni hablemos de los miles y miles de casos en el extranjero cometido durante décadas. Hablemos de nosotros: Grassi, Storni y unos cuantos más. Hablemos que ningún medio habla, investiga sobre ellos. ¿Dónde están las cartas a los lectores clamando x estos hdp? ¿Dónde están los periodistas o gente de la justicia?.
ResponderEliminarCada vez que se trata de un tema que pasa por entre las piernas de las personas ahí están estos perversos dando sus opiniones que le son requeridas x los medios. ¿Dónde están las personas quejándose de ésto?
¿Qué político pide que se reformule el art.2 de la CN? Un obispo gana lo que un juez de la corte (como 20.ooo mangos)y hay una bocha de estos cuervos (con perdón de los cuervos)¿xq lo tenemos que mantener?
Las cosas pasan xq dejamos que pasen.
Amén
Luis:
ResponderEliminarNinguno, porque todos cuentan con la anuencia de la curia para sus hijaputeces. Por eso no escuchará ni una voz de censura.